De igual modo, en el texto, PSE-EE muestra su rechazo a todas las prácticas económicas y financieras basadas en conseguir la confianza de los ciudadanos más vulnerables para realizar prácticas contractuales abusivas e insta a la Diputación a colaborar con los afectados por las cláusulas suelo y a ayudarles de manera que puedan recibir información para ejercer cuantas actuaciones judicales sean precisas en demanda de sus derechos.
Asimismo, el Grupo juntero insta a Kontsumobide-Instituto Vasco de Consumo a realizar un análisis individual por cada Entidad Financiera de este tipo de cláusulas suelo, a efectos de determinar si se han cumplido las condiciones de transparencia, y al Gobierno Vasco a presentar en la Comisión de Hacienda y Presupuestos del Parlamento Vasco, una propuesta de mediación y arbitraje ante situaciones de reclamaciones no atendidas por las entidades financieras colaboradoras, para su estudio, evaluación y posterior decisión.
Por último, se reclama al Gobierno de España que impulse cuantas iniciativas legales sean precisas para garantizar plenamente los derechos de los consumidores, especialmente ante las entidades financieras.
En el texto de la iniciativa presentada en las Juntas Generales de Bizkaia, el Portavoz Socialista, Iñaki Egaña, recuerda que el 20 de Marzo del 2013 el Tribunal Supremo declaró la nulidad de determinadas cláusulas hipotecarias, entre las que se encuentran las cláusulas suelo, en los casos en los que se determine que ha habido una falta de transparencia.
El efecto de los suelos hipotecarios se nota especialmente en momentos como el actual, cuando la referencia se sitúa en niveles históricamente bajos, pues abre la puerta a que se active la cláusula. Obviamente, cuanto más alto sea el suelo menos margen tienen los hipotecados para beneficiarse del descenso del euríbor. Con un mínimo del 3%, una hipoteca de 150.000 euros a 25 años pagará como mínimo 711 euros mensuales, explica Egaña.
Además, recuerda que, según datos de asociaciones de usuarios, en España hay entre 3,5 y 4 millones de familias que tienen hipotecas vivas con cláusula suelo y en un informe del Banco de España de 2010, se daba la cifra de 1,8 millones, contando los datos facilitados por 49 bancos.
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